¿Qué es la carga rápida?
Hay tres métodos de carga diferentes disponibles: lento, rápido y super-rápido. Como ya habrá adivinado, la carga super-rápida es, hoy por hoy, el modo más veloz de cargar un vehículo eléctrico. Merece la pena destacar que, en la mayoría de los casos, solo se carga el vehículo en modo super-rápido hasta alcanzar el 80 % antes de adoptar una velocidad más lenta, a fin de mantener la vida útil de la batería.
Actualmente hay dos formas de cargar el vehículo de forma super-rápida: la primera es la corriente alterna (CA), más potente que los cargadores rápidos de 43 kW. La segunda es la corriente continua (CC). Con ese método se suministra CC directamente al vehículo, por lo que no hace falta usar un convertidor y el coche se carga mucho más rápido.